Para Kierkegaard, principal antecedente del existencialismo, la existencia es ante todo un existente: el existente humano. Se trata de aquel cuyo 'ser' consiste en la subjetividad, en pura libertad de elección. No puede hablarse de la esencia de la existencia, solo puede hablarse de 'este existente' o 'aquel existente' y la verdad de éstos no es sino la 'subjetividad'.
Así, para Kierkegaard, existir equivale a tomar una 'decisión última' respecto a la absoluta trascendencia divina y tal descisión determina 'el momento' que no es ni la mera fluencia del 'tiempo universal' ni tampoco una participación cualquiera en un mundo inteligible eterno. En este contexto, la filosofía no es especulación sino 'decisión' en tanto supone una afirmación de existencias.
Este prioridad que Kierkegaard otroga a la existencia sobre la esencia, será común a muchos otros autores contemporáneos como Nietzsche, Dilthey, Bergson, Sartre y Heidegger, aún cuando todos ellos partieron de supuestos diferentes.
Conceptos centrales del existencialismo
Sören Kierkegaard, el padre del existencialismo
Heidegger y el fracaso de la metafísica occidental
Sartre y el existencialismo francés